Ron Howard vuelve a las salas de cine por Navidad, y lo hace con la mejor compañía posible, dos de los actores más prometedores de Hollywood y una historia épica en las entrañas del océano. Chris Hemsworth y Tom Holland encabezan el reparto de ‘En el corazón del mar’, historia basada en el suceso real que inspiró a Herman Melville para escribir su ‘Moby Dick’, y ambos estuvieron en Madrid para la puesta de largo en la Madrid Premiere Week, donde tuvimos oportunidad de entrevistarles.
Apenas ha alcanzado la mayoría de edad y ya se ha enfrentado a muchos más retos en el cine que otros actores que le doblan en experiencia. El nombre de Tom Holland empezó a sonar en el año 2012, cuando J.A. Bayona lo eligió para encarnar a uno de los hijos de Naomi Watts en ‘Lo imposible’. Tres años más tarde, se vuelve a enfrentar al mar, y al hambre, en una cinta que le dejó en los huesos antes de entrar en el universo Marvel como Spiderman en la nueva cinta de Capitán América, ‘Civil War’. A pesar de todo, Holland se describe a sí mismo como un niño de 16 años al que le encantan los superhéroes.
HSM. Tu primera vez con Ron Howard ¿Cómo ha sido la experiencia?
Tom Holland. Fue un privilegio. Ser un chico de 16 años que tiene la oportunidad de trabajar con Ron Howard… no se puede pedir un mejor profesor. Una de las cosas más geniales de Ron es que es un hombre de éxito, pero esto no le afecta en absoluto. No tiene ego, es muy cercano, entusiasta y ama lo que hace. Es muy muy especial ser testigo de su amor por el cine. Además es muy tranquilo, lo que te invita a confiar en él cuando estas en el set y no entrar en pánico, porque cuando hay un problema es capaz de solucionarlo. Ha sido todo un privilegio trabajar con él.
HSM. El rodaje fue muy duro tanto físico como mental ¿nos contarías alguna anécdota?
T.H. Me encantaría. El rodaje fue especialmente duro pero por motivos razonables ya que estábamos contando una historia sobre personas reales. Algunos de los días más duros eran cuando estábamos muriéndonos de hambre en el mar, porque una vez que estás hambriento estás hambriento, y la única forma de solucionarlo es si comes algo, y no podíamos hacerlo. Sólo una persona por día podía comer almendras, así que a que le tocaba se convertía en el Rey del castillo durante esa jornada. Pero, sin duda, el día más duro para mi fue el que tenía que introducirme dentro de la cabeza del cachalote porque fue asqueroso, y además tuvimos que grabarla de nuevo otra vez, así que fue horroroso.
HSM. Has tenido la oportunidad de rodar en un escenario virtual y en un escenario real ¿Cuál es el que te resulta más complicado?
T.H. Cada uno de ellos tiene sus propios retos. Trabajar en un tanque de agua es muy cansado físicamente, porque están los efectos especiales, el agua, los dobles, las escenas de caza de ballenas, pero en el mar estaba la parte de la desnutrición y estábamos hambrientos todo el tiempo y era muy peligroso estar subiéndote y bajándote del bote así que una vez que estabas dentro no te podías mover. Y podíamos llegar a estar en ellos entre 12 y 15 horas al día. En cierto sentido pudimos experimentar en una mínima parte lo que estos hombres tuvieron que pasar, lo que hace que sea más complicado que trabajar en un estudio.
HSM. ¿Cómo te preparaste para la película, tuviste que aprender a atar cabos y hablar en plan marinero?
T.H. Sí claro. Al igual que todos los actores, tuvimos que ir al colegio dentro del set de rodaje. Ir al río y aprender a navegar, volver al estudio y aprender a hacer nudos. Tuvimos que aprenderlo porque Ron Howard es un director que intenta hacer sus películas lo más auténticas y reales posibles, así que no quería que pareciésemos idiotas en el barco. Realmente no creo que podamos gobernar un barco de verdad, pero podemos aparentarlo. Fue una preparación física muy dura, además de tener que leer un montón de libros y escritos sobre lo que tuvieron que pasar estos hombres, pero nuestra preparación física fue de mucha ayuda.
HSM. Tu personaje en la cinta es un joven marinero que siente una gran admiración por el Primer Oficial, Owen Chase interpretado por Chris Hemsworth ¿se puede extrapolar ese sentimiento a la realidad?
T.H. Por supuesto. El primer día que conocí a Chris me tuve que pellizcar, tenía 16 años, soy un gran fan de Thor y de repente él estaba enfrente de mi. Durante los primeros días había poco de actuación ya que mi personaje tenía que estar completamente nublado por el de Chris y así es como estaba precisamente yo. Pero lo mejor de Chris es que, cuando le conoces, ves que es una persona con los pies en la tierra, muy trabajador y con un gran corazón. Es un gran tipo. Estuvimos entrenándonos durante seis semanas, en las que Chris no estaba porque estaba grabando otra película y cuando vino al set era como el «tipo nuevo», si embargo en menos de un día ya era parte del equipo.
HSM. ¿Quién ganaría en una pelea, Spiderman o Thor?
T.H. Spiderman, por supuesto! Aunque creo que Thor es más fuerte… (ríe).
El mediano de un trío de hermanos actores salidos del continente australiano, Chris Hemsworth se ha hecho mundialmente conocido gracias a su papel del dios nórdico Thor en las películas de Marvel. No obstante, Hemsworth busca su lugar en el cine para demostrar que hay algo más a parte de los martillazos y las armaduras. ‘En el corazón del mar’ es su segunda vez con Ron Howard, que en ‘Rush’ ya mostró una faceta desconocida del actor.
HSM. Tu segunda vez con Ron Howard, ¿por qué has repetido, qué es lo que más te gusta de trabajar con él?
Chris Hemsworth. Me lo pasé genial con él en ‘Rush’ y por supuesto quería repetir. Es un hombre increíblemente colaborador, sin ego, muy abierto a sugerencias. Todo el mundo es un poco tímido al principio, pero con él todo el mundo se siente a gusto, e incluso se atreve a llegar a los extremos gracias a él. Consigue sacar lo mejor de cada persona y cada personaje. Siempre consigue crear un ambiente de colaboración y creación que te lleva a tomar riesgos, a explorar cosas nuevas.
HSM. Este es uno de tus papeles más dramáticos ¿crees que es una buena oportunidad para que te conozcan más allá de tu papel como superhéroe?
C.H. Claro, todo lo que hago me abre nuevas puertas y me da la oportunidad mostrarme diferente. Esta ha sido una oportunidad estupenda. Todavía tengo mucha libertad de elegir lo que quiero hacer. Creo que familiarizarse demasiado con algo o estar demasiado cómodo en un papel puede ser peligroso, ya que puedes sentir que te estás repitiendo.
HSM. ¿Con qué tipo de material habéis trabajado, o habéis documentado? ¿Tuvisteis que leeros ‘Moby Dick’?
C.H. Me leí el libro de ‘En el corazón del mar’, que es en el que se basa realmente la película. También leíamos libros sobre ballenas y sobre la época en la que se desarrolla la cinta, pero lo que realmente era mi Biblia, a lo que siempre volvía, era la novela de ‘El corazón el mar’, incluso subrayaba partes y lo utilizaba como guía en algunas escenas o situaciones para poder llevar a cabo mi personaje.
HSM. ¿Cómo fue tu experiencia de rodar en el mar? ¿Te sentías como el personaje de Tom los primeros días, vomitando por la borda?
C.H. Era agotador. Nunca llegué a vomitar, en el pasado ya había montado alguna vez en barco y me había mareado así que estaba un poco nervioso y me tuve que tomar algunas pastillas para el mareo. Ya sabes, que el héroe de la historia esté mareado y vomitando por las esquinas no da muy buena imagen. Me concentraba en mirar al horizonte y ver la línea recta para no marearme. Pero mucha gente de la tripulación si que vomitaba, desgraciadamente. Fue muy desafiante. Por las noches cuando me tumbaba en la cama, seguía viendo como me balanceaba a pesar de que estaba en tierra firme.
HSM. ¿Crees que ha sido el rodaje más duro al que te has enfrentado?
C.H. La verdad es que sí, pero no por el hecho de rodar en el mar, sino por la parte en la que estábamos muriéndonos de hambre . Eran días muy largos sin comer, bajo el sol, sentados en botes en mitad del mar y también las partes de los efectos especiales. Ha sido un trabajo muy físico y también muy emocional, porque en esos momentos de necesidad sale la verdadera personalidad de la gente. Ha sido un rodaje muy gratificante y había una gran camadería. Eso sí, todos estábamos deseando que llegase el último día para poder comer. (Ríe)
Fotografías: Warner Bros
