Volveremos a viajar y si las ganas de cruzar el charco se han apoderado de ti, hemos seleccionado tres ciudades que no dejan a nadie indiferente cuando las visita. Aunque muchos se decantan por Nueva York, hay muchas más ciudades que visitar. Ellas son Miami y Boston. Dos urbes totalmente diferentes entre sí, en uno de los países más fascinantes del globo, Estados Unidos.
Lo primero que tienes que saber antes de reservar un viaje a cualquiera de ellas, es que tienes que hacerte con una autorización de viaje ESTA para viajar a Estados Unidos. A través de esta web, podrás realizar todos los trámites para obtener tu visado. Una vez tengas los vuelos reservados y los hoteles planificados, solo te queda disfrutar y nosotros te vamos a contar cómo hacerlo en todas ellas.
Miami
Miami puede sonar a tópico. ¿Qué se me ha perdido allí? ¿No es una ciudad muy superficial? Estás afirmaciones no podrían estar más equivocadas. Es una de las ciudades más divertidas de las que hemos conocido. Aúna la cultura yankee, con ese puntito de alegría perpetua que le da los miles de latinos que viven en la ciudad. ¡Tiene lo mejor de ambos! De los rascacielos de Brickell, a la coqueta Little Havana, pasando por las playas kilométricas de Miami Beach.
Hay que arrancar en Miami Beach, punto neurálgico de la ciudad. La habrás visto cientos de veces en series de televisión y películas. Gente guapa, culto al cuerpo, sol, buena onda… Se trata de un lugar donde siempre es verano y luce el sol. Puedes elegir pasear por la orilla del mar y visitando las icónicas casetas de los socorristas o recorrer el paseo que va desde Ocean’s Drive, donde visitar y fotografiar el mítico hotel Colony, la mansión de Gianni Versace, donde, en 1977 el modista fue asesinado o dejarte embaucar los más de 800 edificios Art Decó de esta zona.
¿Otro imprescindible? Little Havana. Este barrio es un testimonio vivo de cómo la inmigración cubana, -que se dio a partir de que Fidel Castro llegara al poder-, ha consolidado uno de los barrios latinos más interesantes y populares de Miami. Desde la famosa Calle 8, se puede recorrer un barrio donde reina la esencia de la isla. Tiene hasta un paseo de las estrellas dedicado a cubanos célebres como Celia Cruz o Gloria Stefan, el parque del dominó, donde se reúnen cada día los ancianos jugando al dominó y al ajedrez, tiendas de puros habanos, restaurantes donde tomar auténtico ron cubano y platos de la isla.
Si vas en busca del distrito artístico, tu parada será Wynwood. En la década de los 70, era un distrito de fábricas y almacenes, pero el magnate Tony Goldman le vio potencial al barrio y, gracias al arte urbano, se fue transformando en lo que es hoy en día. El centro de todo, es el espacio conocido como Wynwood Walls, una galería de arte al aire libre, en la que multitud de artistas urbanos de todas partes del mundo, han creado obras pensadas para este lugar. Pero el arte no se reduce a Wynwood Walls, sino que toma cualquier muro del barrio, habiéndose convertido en un lienzo en blanco para graffiteros.
Boston
Boston es la perfecta ciudad americana. Tiene de todo, pero también el tamaño perfecto para ir a casi todas partes a pie y es conocida por ser ‘America’s walking city’ por eso mismo.No esperes avenidas enormes con rascacielos. Los hay, pero concentrados en un parte de la ciudad y sin competir en altura con los grandes del mundo, más bien se presentan como edificios amables que hacen, más bonito si cabe, el skyline de la ciudad, que se puede divisar desde diferentes puntos y desde el mar.
¿Sabías que Boston fue clave en la Independencia de los Estados Unidos? Varios hitos en su historia, como la masacre de Boston o la Boston Tea Party, encendieron la llama que hizo que unos años más tarde, concretamente un 4 de julio, declarasen su Independencia de las tropas británicas. Precisamente para empaparte de esta historia pre-revolucionaria, tienes que recorrerte The Freedom Trail, la ruta más célebre de la ciudad, que discurre por sitios clave de esta época, como la casa de Paul Revere, el Faneuil Hall que ahora está en plena remodelación o el lugar donde se inició la primera batalla, Bunker Hill Monument.
Los fans del beisbol tienen que acercarse a conocer Fenway Park, el estadio de los Red Sox, donde programan visitar guiadas para descubrir todos los secretos de este lugar de culto. Los amantes del arte no pueden dejar de visitar el museo de Fine Arts de la ciudad, con una importante colección de piezas que van desde el Antiguo Egipto, hasta los artistas estadounidenses más contemporáneos.
¿Qué hay de su gastronomía? Como ya habrás adivinado, su cercanía al mar ha propiciado que aquí la cocina marinera, los pescados y mariscos, sean lo más característico de la cocina bostoniana. Langosta, ostras, clam chowder… (sopa de almejas) Todo ello podrás tomarlo en locales como el mítico Union Oyster House, que frecuentaba el mismo John F. Keneddy, en Luke’s Lobster o Legal Sea Foods.
¡Nos morimos de ganas de volver a viajar a Estados Unidos!