Desde 20 de enero hasta el 2 de febrero, el Corral de la Morería, considerado el mejor tablao flamenco del mundo, presenta el estreno en Madrid de Baile a Dos, el último espectáculo conjunto de Marco Flores y Olga Pericet, artistas clave del flamenco actual.
Olga Pericet y Marco Flores son dos prestigiosos bailarines y coreógrafos, premiados en numerosas ocasiones y con ya dilatados currículums que avalan su posición. Desde 2010, dirigen sus respectivas compañías, con las que han viajado por los cinco continentes, teniendo presencia en los carteles con más reputación de la actualidad: Festival de Jerez, Nimes, USA, Londres, Albuquerque, Ciutat Vella, Festival Suma Flamenca de Madrid o la Bienal de Sevilla.
También han trabajado en teatros como el Lope de Vega (Sevilla), Teatro Albéniz (Madrid), Maison de la Danse (Lyon), Sydney Opera House, City Center (NYC), Lisner Auditorium (Washington), Crocus City Hall (Moscow), o Damascus Opera House.
A lo largo de sus carreras, Marco y Olga nunca han dejado de crear juntos. En los últimos doce años sus colaboraciones han sido continuas, con un buen número de espectáculos firmados por los dos.
“Chanta La Muí”, “En sus 13”, “En clave”, “Complot” o “Recital” son algunas de sus producciones conjuntas, todas con gran éxito de crítica y público, que han sido presentados tanto en España como en otros países: Francia, Holanda, Emiratos Árabes, Australia, Chile, Cuba, Panamá o EEUU. “Baile a dos” es su última producción conjunta.
Baile a dos
En su último trabajo, que podrá disfrutarse del 20 de enero al 2 de febrero en Corral de la Morería, los dos artistas se dan la mano para reconocerse y comunicarse a través del baile, recuperando la tradición de las grandes parejas históricas del flamenco, como Antonio y Rosario o Gades y Hoyos. Les une un largo recorrido artístico, en el que nunca han dejado de encontrarse. Y de esa unión perenne emana un lenguaje propio, íntimo y exclusivo de ellos dos.
Su particular baile en pareja, espejo de tan especial comunicación dancística, es la seña de identidad de esta obra, pero no el único ingrediente. Olga y Marco, ambos con admiradas y aplaudidas carreras en solitario, continúan incansables su camino. De esta forma, confluirán de nuevo en el escenario para seguir explorando en su desarrollo artístico. En su baile. Un baile, que al bailarlo juntos, es, por lo tanto, un baile a dos.